La Postura del Gato tiene múltiples beneficios, que ahondan en los beneficios del yoga en general, de cualquier postura.
La Postura de la Vaca es una de las asanas que antes aprenden los principiantes, aunque sus beneficios se ven también en los yoguis expertos, y suelen incluirla en su rutina diaria.
Beneficios específicos de la Postura del Gato y la Vaca:
- Ayuda a reducir el estrés.
- Induce al estado meditativo, ya que mantienes la mente concentrada en contar despacio e interiormente los segundos que mantienes la Postura del Gato. Así mantienes la mente en blanco y aprendes a controlar tu mente.
- Previene el dolor de espalda, y si ya lo tienes, ayuda a aliviar el dolor.
- Flexibiliza la espalda, el cuello y la caja torácica.
- Endereza la espalda y corrige las malas posturas.
- Fortalece la muñeca, músculos de los antebrazos (pronador redondo y palmar mayor) y los hombros (deltoides).
- Masajea los órganos internos del abdomen y así mejora la digestión.Flexibiliza los músculos de la espalda y los estira, lo que es bueno como tratamiento para la escoliosis.
- Tonifica y fortalece los brazos, que tienen que soportar el peso del cuerpo.
- Mejora la coordinación, especialmente si se practica junto con la Postura del Gato.
- Estira y fortalece los músculos del cuello y de la espalda.
- Ayuda a prevenir dolores de cabeza, puesto que muchos son derivados de problemas en el cuello.
- Es un buen ejercicio respiratorio, como siempre que se practica Yoga.
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Es desestresante.