Practicar meditación de manera regular puede mejorar las funciones cognitivas en personas que sufren pérdida de memoria. Es lo que reveló un estudio dado a conocer durante la Conferencia Internacional de la Asociación de Alzheimer para la Prevención de la Demencia en Washington, D. C.
El Alzheimer y otras demencias causan estragos en el cerebro y quienes lo padecen son propensos a sufrir ansiedad.
La relajación que se produce a través del estado de consciencia promovido por el yoga, hará que la persona pueda dormir mejor, se ponga menos nerviosa y viva más tranquila.
Consciente o inconscientemente, todos buscamos la paz que la meditación aporta a la mente ya sea desde la anciana que se sienta a tejer frente al fuego al navegante que en una tarde de verano se desliza por el río, olvidado del transcurso del tiempo… Porque cuando la atención está totalmente absorta, la mente guarda silencio y olvidamos problemas y preocupaciones.
Las enseñanzas del yoga y la meditación se basan en un comprensión intrincada y precisa del sano funcionamiento del cuerpo y la mente, y sus técnicas están destinadas a sacar el máximo partido a nuestro potencial de buena salud, vitalidad y juventud perdurable.
La meditación occidental ha comenzado a entender que para que el cuerpo se arregle, la mente debe curarse. Por eso, el yoga nos conecta con el momento presente, cuando más practicamos más conscientes nos hacemos de nuestro entorno, más consciencia se genera sobre nosotros mismos. Se abre el camino a una mejor concentración, coordinación motora, tiempo de reacción y memoria.
Nunca es demasiado tarde para acercarse al mundo de la meditación y del yoga, independientemente de que uno tenga cinco o ciento cinco años; cada uno es exactamente tan viejo como se siente.